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Una vela para el diablo (1973)

Una vela para el diablo (1973)

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Descripción

Una vela para el diablo (1973)
Eugenio Martin

Int.: Judy Geeson, Aurora Bautista, Esperanza Roy.
España. DCP. VE. Color. 90’.

En un pueblecito prototípico de la España rural de los 60 dos hermanas solteronas y puritanas dirigen una posada en la que se hospedan jóvenes turistas. Obsesionadas por defender a toda costa la decencia y guiadas por un turbio fanatismo deciden eliminar lo que consideran "indecente".

“Encuadrada dentro del coetáneo movimiento del fantaterror hispano, corriente de la que no rehúye algunas de sus más asumidas características, bien sea por las generosas exhibiciones de epidermis que jalonan su metraje, la crudeza de sus asesinatos, o la inclusión de varias secuencias de un claro regusto fantastique (…), la película resultante está más cercana en su tono y tratamiento al de La semana del asesino (1971) de Eloy de la Iglesia o La campana del infierno (1973) de Claudio Guerín, que al de ejemplos más genéricos como El espanto surge de la tumba (1973) de Carlos Aured o La llamada del vampiro (1971) de José María Elorrieta. (…) El film atesora una personalidad única e intransferible, con unas señas de identidad muy marcadas (…) Quizás el aporte más valioso de Una vela para el diablo resida en el confesado intento por parte de su director de crear un modelo de genuino cine de terror español, apartado de influencias y fórmulas heredadas de cinematografías foráneas. En este sentido, es de destacar tanto el aire entre áspero y documentalista de su realización, como, sobre todo, el poso de crónica negra que anida en su historia, la cual no se diferencia en demasía en la forma (que no en el fondo) a las andanzas de algunos de los asesinos en serie reales más célebres de nuestra historia.” (José Luis Salvador Estébenez)